Bodegas Ridum

Bodegas Ridum fue fundada en 1957, siendo una de las 12 bodegas fundadoras de la Denominación de Origen Ribera del Duero, cuando un grupo de familias visionarias unieron sus esfuerzos y apostaron por elaborar vinos de calidad, en una zona y una época donde casi nadie embotellaba el vino.

Desde 1957

Contamos con un patrimonio de viñas viejas increíble, viñedos plantados en suelos arenosos que resistieron el ataque de la filoxera hace más de 100 años, y que sirvieron para replantar majuelos que hoy tienen 70, 80 y 90 años. Esto, sumado al esfuerzo de varias generaciones cuidando y cultivando con esmero la viña, nos permite que hoy tengamos la esencia de la Ribera del Duero: el Tinto Fino histórico, autóctono, rústico, poderoso y auténtico, una variedad con personalidad única para dar vinos diferentes, profundos, especiales, la historia viva de la Ribera del Duero.

Nos corresponde hoy cuidar y mimar estos viñedos, se lo debemos a la historia y todas las personas que los han cuidado antes que nosotros, pero también, para que podamos seguir disfrutándolos durante muchos años más. Son nuestra herencia y nuestro legado.

Conoce nuestros vinos

Crianza - Ridum

Reserva - Ridum

Selección - Ridum

Viñas viejas - Ridum

200 hectáreas de viñedos

Contamos con 200 hectáreas de viñedos propios situados en La Horra (Burgos), en el centro del conocido como "Triángulo de Oro" de los viñedos (Roa- La Horra- Olmedillo) a unas altitudes comprendidas entre 800 - 850 m. La mayoría de nuestras viñas están plantadas en vaso, de manera tradicional, ya que más de la mitad del viñedo tiene una edad superior a 50 años y tenemos la enorme suerte de disponer de varios “majuelos” de más de 100 años

Nuestra bodega cuenta con barricas de roble francés (40%) y americano (60%) con capacidades de 225, 300 y 500 litros, además de 63 depósitos de acero inoxidable.

Estamos elaborando desde vinos jóvenes muy afrutados, hasta vinos provenientes de una selección de pagos centenarios, a fin de crear vinos de alta calidad que expresan el espíritu de la Ribera del Duero.

Vinos de familia. Nuestros padres y abuelos nos han dejado un legado único.

A día de hoy tenemos la gran responsabilidad de cuidar la herencia que nos han dejado nuestros familiares y honrar a todas aquellas personas que se esforzaron por dejarnos este magnífico legado y que podamos seguir disfrutándolo durante muchos años más.